Dejarle ir....

No me gustan las despedidas, en realidad creo que a nadie le gustan, sobre todo cuando debemos hacerlo de esas personas que quieres y han llenado tu vida de alguna u otra manera….

Creo que me toca despedirme, hoy creo me toca dejarle ir a uno de los cariños más IMPORTANTES, cuidado si no es el más intenso y querido que haya tenido, claro de esos que te ganan, que no llevan tu sangre, pero que llegas a querer tanto o más que la familia….no es fácil, ese susto interminable que abriga mi corazón y es que a parte de latir y permitir vivir, es capaz de sentir, llorar, emocionar y extrañar, últimamente el mío vive en un constante sobresalto, tal vez presintiendo la tristeza del adiós involuntario y egoísta, de ese mismo adiós que te roba el sueño y la sonrisa, que te inquieta y entristece y es que es raro, todo se me hace raro, los seres humanos somos así, no logramos entender las cosas o sentimientos, mucho más si no logramos controlar esas emociones nuevas que ponen tu mundo de cabeza…. Nada sexual, solo es el cariño más puro, ese mismo que dejare partir aunque se muera mi risa, ya no solo es que nos separe medio continente, eso es momentáneo y los meses pasan rápido eso quiero creer, es mucho más que eso, es que a veces necesitamos sentirnos importantes en la vida de las personas que adoramos, no sé si es cuestión de vanidad o qué carajo, no es cuestión de besos o abrazos, es tal vez necesitar sentir que ese cariño te espera, te extraña, que te recuerda a segundos y a ratos, ya se que nadie quiere igual, que todos queremos diferente….. Qué locura; dejarle ir no es fácil si se quiere con el alma y esa misma alma exige más amor...

Sin embargo aunque duela tal vez sea necesario dejarle ir aunque no quiera, dejarle ir, dejarle ir dos palabras que parecen simples, pero como retumban y hacen ruido, como una guitarra desafinada….

                                                                                                                     FOTO(RB)