Cierro los ojos y veo a una chica sentada a la orilla de su mar imaginario, ella sonríe lejana y se enjuga las lágrimas, ella espera y desespera, escucha el susurro de las olas y deletrea, sonríe de nuevo, y se pierde silente en su atardecer, ese es su mar, donde se puede encontrar cada tarde con sus recuerdos, los espera, con ellos recorre su arena rojiza, los despide con una sonrisa de mentira, los abraza y aunque no quiera dejarlos ir poco a poco les va soltando las alas cual papagayo en verano; mientras le va susurrando la brisa, ella una y otra vez visita su mar imaginario,una y otra vez cada día, se siente tranquila allí, porque allí puede verse sonreír con el cariño aquel que no se olvida!
Fotografía: Hilconsmary Mundarain F
2 comentarios:
hola miguita =) bonito, te dejo un abrazo :D
Hola Carlos, bienvenido siempre a mi espacio..abrazos :)
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